En la mediación ensayística de "Hydra Decapita", la deshumanización de la esclavitud se transforma en un espacio especulativo de posibilidades poshumanas. The Otolith Group (Kodwo Eshun y Angalika Sagar) reactiva el mito de Drexciya, grupo tecno de Detroit de los años 90 que imaginaba que los hijos no nacidos de las esclavas embarazadas que se ahogaban se convertían en mutantes capaces de vivir bajo el agua. En palabras de Eshun, esta ciencia ficción implica «solo reimaginar la atrocidad biopolítica del ‘pasaje medio’». Las imágenes de la superficie del océano; las referencias a "The Slave Ship", la pintura de J. M. W. Turner de 1840 sobre la masacre del Zong; y el trabajo de una persona inventada que escucha y transcribe las «silenciosas voces» resuenan juntos, creando una constelación que es a la vez un réquiem y una reparadora ficción que mira hacia delante, a un futuro de vidas más vivibles.